Nuestras Clauditas llevan con nosotros desde hace más de 6
meses, llegaron a la casita de Trocitos de Boda y cada cierto tiempo un grupo
de Clauditas deciden acicalarse, pintarse los morritos y los ojos, ponerse
alguna diadema o algún tocado e irse de boda, de despedida de soltera o de
fiesta por ahí… es ahí cuando decidimos colocarlas en alguna presentación
femenina con una blonda, un lacito y a veces una etiqueta y se marchan a
conocer mundo… les gusta tanto pasarlo bien!
De nuestras manos han salido decenas de Clauditas en estos
últimos meses, que se colocan orgullosas y coquetuelas en la solapa de su dueña
y dicen “por qué no nos lo pasamos genial?” y allí que van… Londres, Suiza,
Madrid, Sevilla, Galicia… están conociendo mucho mundo y sé a ciencia cierta
que han roto ya más de un corazón por el camino.
Muchas novias me preguntan… ¿Clauditas? ¿Por qué se llaman
Clauditas? Y recuerdo que cuando ideamos a nuestras amiguitas y puedo deciros
que estuvimos meses dándole vueltas, el único nombre que tuve en mi cabeza
desde el primer momento fue Claudita. Tenían que llamarse así.
Claudita es parte de nuestra vida y de nuestro corazón, una de las
niñas más dulces, delicadas y preciosas que hay en este mundo, es coqueta, le
gusta mucho viajar y es una niña muy honesta y auténtica y la quiero como una segunda
hermana, siempre que termino de coser una de sus tocayas sé que si estuviera a
mi lado –nos separan unos pocos cientos de kilómetros- a ella le encantaría y
me diría “Ay, qué guapaa!”, por eso tuve tan claro que nuestras Clauditas
tenían que llamarse así, porque de verdad lo que hacemos en Trocitos de Boda lo
hacemos desde el corazón.
Nuestras Clauditas son un pequeño homenaje que le hago ahora que no la tengo cerca cada día...
